Los Círculos de 8 son el corazón vivo
del Poder del Nosotros.
Son pequeños grupos donde practicamos, semana a semana, el poder de la intención por otros,
y experimentamos en carne propia que lo que damos, recibimos.
Un Círculo de 8 es un espacio íntimo donde ocho personas se reúnen una vez por semana —presencial o virtualmente— para practicar el poder de la intención por otros.
En cada encuentro, una persona es elegida para recibir la intención del grupo, mientras las demás sostienen el campo con amor, presencia y corazón abierto.
Es una experiencia de dar desinteresadamente y aprender a recibir, recordando que ambas energías son una sola.
Cada círculo recibe una meditación guiada grabada para acompañar la práctica, y cuenta con un guía que acompaña el primer encuentro, para sostener la energía y ayudar al grupo a entrar en sintonía.
Esta práctica —inspirada en las experiencias de Lynne McTaggart— nos invita a experimentar cómo, cuando muchos corazones se unen en una misma frecuencia, el campo se expande y ocurren transformaciones profundas: físicas, emocionales y energéticas.
Cada Círculo tiene su propio pulso, pero todos comparten una misma esencia: la presencia y la coherencia del grupo.
Los encuentros comienzan con un breve momento de check-in:
un espacio de escucha donde cada persona puede compartir cómo llega,
qué siente o qué necesita.
Este momento de apertura no es solo para “ponerse al día”; es lo que permite
que las energías se sincronicen.
Cuanto más se conocen y se abren los miembros del círculo, más se funde
la vibración del grupo en un solo campo.
Luego se abre el espacio de intención con respiración consciente o silencio.
Se declara la intención por la persona elegida para recibir esa semana,
y durante unos minutos todos los corazones laten en una sola dirección.
Al cerrar, hay un tiempo de compartida: no para analizar ni interpretar,
sino para dar testimonio de lo que se sintió y de cómo se movió la energía.
Sostener el mismo grupo semana a semana permite que la confianza se profundice
y que la frecuencia grupal se vuelva cada vez más estable. Es esa constancia la que
mantiene abierto el canal del campo,
más allá de cada encuentro.
En esa práctica tan simple y profunda,
algo se ordena.
Lo que damos con el corazón,
vuelve multiplicado. No siempre en la misma forma,
pero siempre en la misma vibración.
Los Círculos de 8 son una
escuela de amor consciente.
Nos invitan a salir del “yo” que pide, espera o busca, y a entrar en el
“nosotros” que ofrece sin condiciones.
Practicamos el dar desinteresadamente,
nos corrernos del deseo de controlar el resultado
y del impulso de pedir solo para uno.
En esa entrega, la energía del ego se suaviza
y el flujo se limpia.
La vida empieza a moverse con más facilidad,
porque dar y recibir son dos movimientos
del mismo amor.
También aprendemos a recibir
—algo que a muchos nos cuesta—,
entendiendo que permitir que otros nos
sostengan es un acto de confianza y humildad.
Esta práctica es un entrenamiento para vivir en coherencia con la ley del intercambio natural:
cuando el amor circula libremente,
todos nos expandimos.
Si sentís el llamado a vivir esta experiencia, no tenés que hacer nada más que
inscribirte al movimiento.
A partir del encuentro del 21 de diciembre, se conformarán los primeros Círculos de 8, integrando a todas las personas que deseen sostener esta práctica semana a semana.
Desde la organización del movimiento iremos formando los grupos y cada uno contará con un
guía que acompañará su primer encuentro
para ayudarlos a abrir el espacio
y sintonizar el campo.
Una vez asignado tu grupo, recibirás por mail la guía práctica, la meditación grabada y todas las indicaciones para comenzar.
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En los Círculos de 8 aprendemos a vivir la verdad más simple y profunda:
que cuando sostenemos a otro, el campo nos sostiene a nosotros.
Eso es el Poder del Nosotros. 🌸